Politica de suma cero 

Eviel: ¿Cambio de luces?

La designación de EVIEL PÉREZ MAGAÑA, como nuevo titular de la Secretaría de Desarrollo Social (SEDESOL), sin duda alguna es una muestra de los buenos oficios del tuxtepecano en el equipo cercano del presidente ENRIQUE PEÑA NIETO, particularmente con el “promotor e impulsor de la CNTE”: LUIS ENRIQUE MIRANDA NAVA. Para quienes saben leer entre líneas la política nacional, es una señal inequívoca de que si bien sólo se trata de un cargo efímero, que tardará sólo diez meses, era necesario que MIRANDA dejara, con el aval del presidente PEÑA NIETO, a uno de sus segundos de abordo, más incondicionales.

Para los críticos del actual régimen, ello implica un retorno de los leales a ULISES RUIZ a Oaxaca. Los más escépticos rechazan la especie. Durante los sismos de septiembre que devastaron la región istmeña y el arribo de titulares de algunas dependencias federales como ROSARIO ROBLES, de SEDATU; JOSÉ NARRO de Salud o JOSÉ CALZADA, de SAGARPA, entre otros, hubo ciertas recomendaciones en las cúpulas de poder político que le cerraron las puertas a dos oaxaqueños que tienen peso en la política nacional: uno, el entonces Subsecretario de Desarrollo Social y Humano, EVIEL PÉREZ MAGAÑA y otra, la diputada federal, MARIANA BENÍTEZ TIBURCIO. Ambos, prácticamente no se aparecieron por la zona devastada. Cuestión de imaginar quién los vetó para las tareas humanitaria.

Sin embargo, PÉREZ MAGAÑA estuvo muy activo en Chiapas, haciendo el uno-dos con su jefe: MIRANDA NAVA. Si como alguien dijo, la designación del primero como titular de la SEDESOL tiene más tinte electoral que un afortunado enroque, es importante subrayar que puede repetirse el fenómeno que se dio en 1999-2000, cuando el gobernador JOSÉ MURAT, le cerró por completo las puertas al entonces poderoso Secretario de Gobernación, del régimen de ERNESTO ZEDILLO: DIÓDORO CARRASCO. El retorno de ULISES RUIZ puede darse en los arreglos y compromisos que realizó su amiga IVONNE ORTEGA PACHECO, para sumarse a la campaña de JOSÉ ANTONIO MEADE, y no como inercia de la designación de PÉREZ MAGAÑA.

Por lo pronto, EVIEL cae para arriba –como se dice vulgarmente-. Nadie le garantizaba el triunfo en su natal Tuxtepec, cuyo sueño era repetir en la candidatura federal. Hay que recordar que uno de sus grandes traumas fue perder la casilla cercana a su domicilio, cuando buscó la gubernatura en el 2010 y fue derrotado por GABINO CUÉ. Vale más pájaro en mano que cien volando, que es lo mismo a estar en el gabinete del presidente PEÑA NIETO, así fuera sólo unos meses. (JPA)

 

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