Emigdio/Raymundo: Violencia política

POLÍTICA DE SUMA CERO

El lunes 25 de junio, la camioneta en donde viajaba EMIGDIO LÓPEZ AVENDAÑO, candidato a diputado local por la coalición “Juntos haremos historia” y cuatro de sus colaboradores, entre ellos una mujer, fue emboscada en un camino de terracería en jurisdicción de Yogana, Ejutla de Crespo. El saldo fue de cinco muertos. El vehículo presentaba poco menos de cien impactos de armas de grueso calibre. El atentado fue mortal y sin piedad. Desde que inició el proceso electoral 2018, se sabía que en comunidades como San Vicente Coatlán y Yogana, pertenecientes a Ejutla, así como Santa Cruz Zenzontepec, San Lorenzo Texmelucan, Santiago Amoltepec, Santa María Zaniza, Santo Domingo Teojomulco, San Mateo Yucutindoo y otras de la Sierra Sur, en donde cientos de ciudadanos caminan al filo de la ley y velando armas, habían advertido que no querían la presencia de ningún candidato, del partido que fuera.

El martes 26, al mediodía, el vehículo en que viajaba RAYMUNDO CARMONA LAREDO, presidente estatal del PRD y candidato a la presidencia municipal de San Pedro Pochutla, por tercera vez, con la bandera de la coalición “Por México al Frente”, fue objeto de un atentado. CARMONA tuvo que ser trasladado vía aérea a la capital del estado, en donde fue ingresado con cuatro heridas por proyectil de arma de fuego. Sus cuatro acompañantes, entre ellos una mujer, fueron también blanco de las balas. Todos resultaron heridos. Ambos actos criminales se dan a menos de una semana de llevarse a cabo los comicios del primero de julio.

En la madrugada del 2 de junio, PAMELA IZTZAMARAY TERÁN PINEDA, candidata a segunda posición en la planilla municipal de Juchitán de Zaragoza, fue asesinada por un comando armado. En este hecho criminal murió la joven periodista, MARÍA DEL SOL CRUZ JARQUÍN y un maestro de la Sección 22, primo de la primera, ADELFO GUERRA, que fungía como chofer. Estamos hablando de tres hecho criminales y de violencia político-electoral. Si bien es cierto que los móviles son aún objeto de investigación, lo cierto es que en estos tiempos no puede haber confusión.

En el caso de EMIGDIO LÓPEZ, opiniones documentadas lo ubican como alguien que realizó activismo político en la Sierra Sur, en donde hay problemas serios de inseguridad, cultivos ilícitos, pero además, añejas disputas agrarias. De CARMONA LAREDO se sabe que en Pochutla, la tierra que pretende gobernar por tercera ocasión, enfrenta una gran oposición y repudio ciudadano. No hay pues elementos de juicio con los que se pueda afirmar que el asesinato del primero y el atentado del segundo, con sus respectivas secuelas en sus cercanos, sea algo ajeno al entorno político. (JPA)